Primeros días

Di a luz hace tres días. Estoy amamantando, agotada y sensible. ¿Qué pasa?

¡Mamá, no estás sola! Estás en pleno proceso de lactancia, probablemente en la transición del hospital a casa y experimentando muchos cambios hormonales. ¡Se vuelve más fácil, te lo prometo!

Analicemos qué está pasando durante este tiempo y hablemos de maneras de sobrellevarlo.

Lactancia materna

Durante los primeros 2 a 4 días después del parto, tu bebé recibe calostro de tus pechos. El calostro es increíblemente beneficioso para tu bebé, ¡y con un poco es suficiente! Aunque tus pechos no produzcan mucha cantidad, ten la seguridad de que es todo lo que tu bebé necesita hasta que te baje la leche. Dudar de la capacidad de tu cuerpo para producir leche, experimentar dificultades con la lactancia, la falta de sueño y estar lejos de casa pueden dificultar los primeros días.

Para el tercer día, es probable que tu leche esté en transición del calostro a la leche madura. Esto significa que tus pechos se están llenando más y podrían sentirse congestionados. Las tomas frecuentes (8 a 12 veces en 24 horas) son cruciales a medida que tu cuerpo aprende a regular el suministro de leche para satisfacer las necesidades de tu bebé. Podrías sentir como si tu bebé estuviera mamando todo el tiempo, pero esto es normal. Su barriguita es pequeña y la leche materna se digiere muy fácilmente.

Cólicos

Es posible que sientas cólicos al amamantar, durante los primeros días y hasta aproximadamente una semana después del parto. Esto se debe a que la lactancia libera una hormona llamada oxitocina, que hace que el útero se contraiga y recupere su tamaño normal.

Estos cólicos pueden parecerse a los cólicos menstruales o a una versión más leve de las contracciones que tuviste durante el parto. Por lo general, no son motivo de preocupación y deberían mejorar a medida que tu cuerpo se recupera. Sin embargo, si duran más de una semana o empeoran en lugar de mejorar, es recomendable consultar con tu médico.

Consejos para el bienestar:

    • Consulta con tu médico sobre analgésicos si los cólicos te molestan.
    • Frótate suavemente la parte baja del vientre.
    • Acuéstate boca abajo con una almohada debajo.
    • Usa una almohadilla térmica sobre el vientre.
    • Respira profundamente e intenta relajarte.

Privación del sueño

Dormir cuando tu bebé duerme parece más fácil de lo que es, pero tu cuerpo se está recuperando del parto y necesitas descansar. Tus patrones de sueño han cambiado, ya que tu bebé necesita tomas nocturnas frecuentes para su crecimiento y bienestar.

Piensa en el sueño como un ciclo de 24 horas. Incluyendo las siestas, intenta dormir de 7 a 8 horas en 24 horas. Probablemente no consigas esas horas de una sola noche.

Comunica tus necesidades con tu red de apoyo. Delega las tareas del hogar, la cocina y el cuidado de otros niños para que tú y tu bebé puedan concentrarse en la lactancia y el descanso.

Tu bebé también podría tener mucho sueño. Si no se despierta solo, quizás tengas que despertarlo para alimentarlo. Haz clic aquí para obtener consejos sobre cómo amamantar a un bebé dormilón y aquí para obtener información sobre los patrones de sueño de los bebés.

Hormonas

En el hospital, muchas mamás se sienten llenas de adrenalina y apoyadas por el personal. Tras el parto, los niveles de oxitocina (la "hormona del amor") aumentan rápidamente, lo que ayuda a crear un vínculo con el bebé y a fortalecer el instinto maternal.

Volver a casa puede traer una mezcla de emociones. Si bien es emocionante estar en casa, puede que no se sienta como esperabas. A medida que la oxitocina comienza a disminuir, pueden surgir sentimientos de ansiedad o tristeza.

Los cambios hormonales también juegan un papel importante en la lactancia. Una disminución repentina de estrógeno y progesterona, combinada con un aumento de prolactina (la hormona productora de leche), ayuda a que la leche pase del calostro a leche madura. Se puede decir que las hormonas posparto están "por todas partes", y tu estado de ánimo también.

Puede que tus hormonas tarden algunos meses en regularse, pero empezarás a sentirte bien de nuevo. Habla con tu médico sobre cualquier síntoma de depresión posparto y comparte tus sentimientos con tus seres queridos.

Otras maneras de afrontarlo:

    • Lleva una dieta equilibrada.
    • Lleva un diario de tus pensamientos y sentimientos.
    • Respira aire fresco.
    • Pide ayuda con las responsabilidades diarias.
    • Ten paciencia contigo misma y date tiempo para adaptarte a tu nueva normalidad.

Haz clic aquí para obtener más información sobre las etapas del posparto.

Estás atravesando una de las experiencias más desafiantes y gratificantes de tu vida, y eres más fuerte de lo que crees. Confía en tu instinto, busca apoyo y recuerda que todo tu esfuerzo contribuye al desarrollo de tu bebé. ¡Tú puedes!

Early Days of Breastfeeding_SPL.jpg---Engorgement_SPL.jpg

4th Trimester_SPL.jpg---Not Feeling Like Yourself_SPL.jpg

Fuentes:

https://americanpregnancy.org/healthy-pregnancy/first-year-of-life/baby-blues/ 

https://www.wichealth.org/Member/Resource?id=4948&languageId=2 

 

¿Le fue útil esta información?
Usuarios a los que les pareció útil: 2 de 2

Comentarios

0 comentarios

El artículo está cerrado para comentarios.

Preguntas relacionadas

Más información